Gracias al Committee to Protect Bloggers (international readers, go there, it's in English), me entero de que Mohammed Erraji fue primero arrestado por criticar en su blog "las políticas sociales del Rey". En este sitio (en francés), se reproduce el artículo entero del que sólo voy a traducir una parte porque no creo que sea necesario más para hacernos una idea:
Es preciso reconocer que lo que destruye nuestro país y lo que le ha valido estar en puestos vergonzosos en las clasificaciones mundiales, es la economía de ayudas que no beneficia al pueblo. Desde luego que no hacen falta grandes palabras de políticos para definir lo que es el asesinato. Significa simplemente apropiarse injustamente de los derechos de otros. (El dinero) se va en trasportes, los GRIMA, que el rey distribuye a los ciudadanos que piden su ayuda por carta de la misma manera que un mendigo implora la caridad de los paseantes. Los estados que respetan a sus ciudadanos no les transforman en mendigos que imploran la caridad del glorioso trono, si no que ellos mismos los construyen mediante fábricas e industrias para permitirles ganarse la vida mejor con dignidad y respeto. Desde luego, este no es el caso, porque estos acuerdos que no se distribuyen a los que se lo merecen de los pobres y dejados de la mano de Dios, no queda más que decir que esto no beneficia al ciudadano marroquí. El empleo, la salud y la enseñanza son derechos garantizados por la constitución y el Estado debe asegurar a los ciudadanos las condiciones de vida dignas en lugar de humillarles de esta manera.
Y lo que es más, el rey no puede conceder estos acuerdos a su arbitrio sin control ni supervisión, ofreciéndoles a cualquiera que les ofrece un elogio. Porque esto contribuye a fabricar ejércitos de cortesanos que en lugar de ganarse la vida con el sudor de sus frentes, la ganan pagándosela con aclamaciones y elogios que a menudo no son creíbles. El rey anima así a su pueblo al asesinato.
Esto hace a los marroquíes un pueblo sin dignidad, que vive de los dones y las ofrendas sin que tengamos que tener a nadie que tenga piedad de nosotros si no alguien que se asegure de repartir la riqueza de modo equitativo.
Resultado: el bloguero Erraji ha sido condenado a dos años de cárcel y una multa de 5.000 dinares marroquíes.
Ya se ha creado una página para pedir su liberación: Free Mohammed Erraji, donde se puede firmar en apoyo del bloguero.
La BBC ha publicado la noticia (link in English).