Gran Bretaña ¿disminuyendo las libertades?

martes, febrero 24, 2009

Llevaba tiempo intentando plantear esta cuestión. A pesar de que hay cosas puntuales con las que no estoy de acuerdo, este artículo en el País, traducción de uno escrito para The Guardian, creo que señala bastantes cosas de las que ya he hablado aquí con anterioridad.

el Reino Unido posee unas leyes sobre vigilancia tan vagas y elásticas, que el Ayuntamiento de una pequeña ciudad llamada Poole ha podido aprovecharlas para espiar durante dos semanas a una familia erróneamente acusada de haber mentido en un formulario de solicitud de matrícula en un colegio. Los espías oficiales, al parecer, tomaron abundantes notas sobre los movimientos de la madre y sus tres hijos, a los que denominaban "objetivos", y los vigilaron de noche para dejar claro dónde dormían. ¿Y se supone que estamos en Inglaterra?

(...) No hay duda de que la lucha contra el terrorismo exige ciertas restricciones. No hay duda de que la existencia de los circuitos cerrados de televisión ayudan a reducir el crimen. Pero resulta que tenemos más circuitos cerrados, una base de ADN más grande, un Registro Nacional de Identidad más ambicioso (e impracticable), más poderes policiales y más vigilancia del correo electrónico que cualquier otra democracia liberal comparable. Y además disponemos de una burocracia tan centralizada e incompetente a la hora de administrar todo ese volumen de datos, que es capaz de perder un disco con los detalles de prestaciones por hijos de 25 millones de personas.

(...) Hace un par de años pregunté a un importante político del nuevo laborismo si su Gobierno no se había equivocado en su forma de establecer el equilibrio entre la seguridad y la libertad. "Bueno", me contestó, "lo que sí le puedo decir es que, si se pregunta a los británicos, siempre escogerán más seguridad". Por eso es por lo que la cuestión está en nuestras manos. Dado que nuestros líderes se han vuelto en general seguidores -siguen el último sondeo de opinión, el último grupo de estudio o la última campaña de prensa-, somos nosotros, los británicos, quienes debemos hacerles cambiar de opinión sobre lo que quiere "el pueblo".
Quiero que lo leáis entero (si podéis) y penséis sobre ello (hoy no voy a poner más posts porque creo que esto es lo suficientemente importante como para pararse y meditar sobre ello).

Hace unos días, relacionado con esta cuestión y para que entendáis a lo que me refiero, encontré este post en el que el diputado laborista del Parlamento Europeo Richard Corbett hace una de las declaraciones más estúpidas e hipócritas que he visto en mucho tiempo:
Es particularmente revolvente que el UKIP (partido liberatario inglés) y Mr Wilders se hagan pasar por unos mártires de esta causa, señalando que se les está denegando el derecho a la libre expresión. Esto es fatuo y lo saben. Del mismo modo que los semejantes a Abu Hamza han sido arrestados por incitar al odio racial y la violencia en Gran Bretaña, así también debe Wilders tener prohibida la entrada para mostrar y discutir una película que, en las palabras del Primer Ministro holandés Jens Balkenende, no sirve a ningún otro propósito si no el de ofender.
Con independencia de que la compración entre Abu Hamza (que llamaba a matar infieles) y Wilders (que pide que se prohíba el Corán por incitar al odio racial contra los no creyentes) es bastante ofensiva,resulta que el sr. Corbett encima miente. Abu Hamza no fue detenido en un principio (años 80) cuando se sabía que predicaba la matanza de los infieles, hasta el año 2000 y no de forma permanente. En el año 1997, el MI5 se le acercó y le informaron de que podía seguir con sus sermones mientras no hubiera muertos en Inglaterra.

Pero no sólo eso: varios de la mezquita de Finsbury Park, se acercaron la friolera de siete veces a denunciar lo que este señor predicaba:

Abdulkadir Barkatullah, uno de los que conformaba el comité de gestión de la mezquita que fue expulsado por Abu Hamza, dijo que él y los representantes de su comunidad fueron a la policía siete veces a quejarse de los asaltos y las actividades extremistas dentro de la mezquita. No se realizó ninguna acción
El Primer Ministro había dicho a la comunidad musulmana que debía hacer más para purgar a los extremistas en su seno, pero Barkatullah dijo: "Cuando hicimos precisamente eso con Abu Hamza, fuimos ignorados".
Pero no sólo desde dentro también desde fuera se les advirtió:
(Las agencias de inteligencia) de Francia, España, Alemania, Italia, Bélgica y Holanda, habían acusado a Abu Hamza de ser el jefe del anillo de una operación terrorista. Los franceses y los argelinos habían introducido espías en la mezquita y estaban horrorizados de lo que habían descubierto. Egipto quería cambiarlo por un prisionero británico. Todos se lo dijeron a Whitehall, pero nada se hizo. 
Lo único que se ve es la rapidez en contener a a alguien que no ha llamado a cometer ningún delito (con indpendencia de que se esté de acuerdo o no con él) y la tardanza de 25 años en detener a un tío que tenía en su casa los siete volúmenes de la Jihad Afgana.

Conclusión: ¿realmente esta disminución de las libertades se establece para beneficio del ciudadano o para controlarle?

Antes de comentar, tened en cuenta este post. Gracias.