Pero, tranquilos: el CNI les está vigilando:
El Centro Nacional de Inteligencia (CNI) tiene localizado y controlado a un grupo de ex soldados españoles musulmanes que realizan entrenamientos para integrarse en la Yihad islámica, según confirmaron a LA RAZÓN fuentes militares.¿Cómo se os queda el cuerpo? Esperemos que el CNI los controle y no se quede de brazos cruzados porque tanto en uno como en otro caso esto es peligrosísimo. Pero yo, personalmente,veo aún más peligroso el comportamiento de los "vigilantes": tener una policía religiosa dentro del ejército no es lo que se dice tranquilizador.
A pesar de que la cifra de los ex miembros de las Fuerzas Armadas españolas que se están preparando para entrar en los grupos radicales no ha sido concretada, sí que se sabe que son alrededor de una decena y que actualmente se encuentran formándose en campos de entrenamiento de los radicales islámicos, tal y como señalan las citadas fuentes. De la misma manera, subrayan que ninguno tuvo acceso a información sensible durante su servicio en el Ejército dado que no ocupaban puestos de responsabilidad.
Los campos de entrenamiento de la Yihad se ubican generalmente en países como Irak, Afganistán, Yemen o Arabia Saudí, aunque se han localizado algunos campos móviles en zonas del Magreb y en Palestina.
Las investigaciones del departamento que dirige Alberto Saiz no sólo han llevado a detectar a este grupo de ex miembros de las Fuerzas Armadas «reconvertidos» al islamismo radical militante, sino que han informado sobre las actividades, menos peligrosas sin duda, que realiza una pequeña parte de los soldados musulmanes integrados en el Ejército.
En las unidades con una mayor presencia de soldados que profesan esta religión se han creado «vigilantes», una figura encarnada por alguno de los militares musulmanes que discretamente vela porque sus correligionarios cumplan los preceptos islámicos en cuanto a comida y bebida.