El mejor resumen de la cumbre lo he encontrado en el excelente blog portugués O Cachimbo de Magritte. Y eso que está escrito antes de que tuviera lugar:
Da cimeira nada sairá, excepto, claro está, a humilhação da Europa – já evidente aos olhos de todos – e a concessão gratuita, aos ditadores que nos visitam, de um sopro de dignidade e de legitimidade política e moral de que necessitam absolutamente, mas que não merecem.
De la cumbre nada saldrá, excepto, claro está, la humillación de Europa -ya evidente a los ojos de todos- y la concesión gratuita a los dictadores que nos visitan de una legitimidad política y moral que necesitan desesperadamente, pero que no merecen.
Y así ha sido.
Ya desde el principio había dos temas espinosos: Mugabe, el dictador de Zimbabwe, país al que ha condenado a una represión violenta que apenas tiene cobertura en España y en donde la inflación ha crecido un 6592,8% el pasado agosto, y el genocidio de Darfur, junto claro con la inmigración, de la que hablaré después. La petición por parte de los grupos de Derechos Humanos era clara: la UE debía pronunciarse contra las dictaduras y en favor de la defensa de los Derechos Humanos:
[los activistas han pedido que] actúen en la crisis de la provincia sudanesa de Darfur y hagan frente al presidente de Zimbabue, Robert Mugabe, por abusos de los derechos humanos.
Pero desde el inicio se vio que no iba a haber una postura común en ninguno de los dos temas: la cuestión de Darfur fue olvidada pronto y en la foto de al lado vemos al dictador Mugabe departiendo amigablemente con el presidente falsifica-curriculums, el socialista Sócrates. DE El País.com:
Los primeros en llegar han sido el líder libio Muamar Al Gadafi, que inició el jueves una visita oficial a Portugal, y el polémico presidente de Zimbabue, Robert Mugabe, que llegó anoche casi de incógnito. La presencia del político que tiene prohibida oficialmente la entrada en Europa por las violaciones a los derechos humanos de su régimen, llevó al Reino Unido a desaparecer prácticamente de la conferencia, Gordon Brown ha renunciado a asistir a la cumbre, y se ha convertido en el foco de atención de la prensa, mientras el gobierno portugués intenta restarle protagonismo.
Aparte de las faltas tipográficas que he corregido, podemos ver que El País, no defiende especialmente a Gordon Brown, a pesar de que ha sido el líder más correcto en el trato con Mugabe (lo mismo que lo fue con la represión de la Revolución Azafrán en Birmania). Sin embargo, Mr. Brown ha tenido que aguantar la reprimenda de Durao Barroso, como bien subraya Pandemonio. Si el presidente de Zimbabwe tiene prohibida la entrada a la UE, lo más lógico es que no se le deje entrar. Y me da que Portugal es territorio de la UE.
Pero seguimos:
Gadafi se ha entrevistado este viernes con Sócrates y ha pronunciado una conferencia en la Universidad de Lisboa en la que ha pedido la aplicación de la democracia en la ONU, tras criticar al Consejo de Seguridad de ese organismo, y ha advertido que a veces los débiles optan por la venganza a través del terrorismo. También ha criticado la intervención de EE UU en Afganistán, invitó a reflexionar sobre el atentado contra las Torres Gemelas de Nueva York en 2001 y ha abogado además por una indemnización a los países que han sufrido el colonialismo.
Es curioso: la intervención en Afganistán NO es de los EEUU, es de la ONU, pero al País se le olvida reseñarlo.
Pero sin duda lo más interesante es lo de la indemnización a los países que sufrieron el colonialismo, indisolublemente unido de la cuestión inmigratoria porque así lo determinan los países africanos que consideran que como ellos sufrieron la colonización, ahora deben tener compensaciones.
El caso más preclaro es el de Gadafi. El año pasado pedía 10.000 millones para África como precio para parar la inmigración. Este año ha dicho que con 1.000 millones, él personalmente se conforma:
Según fuentes europeas, comenzó achacando el problema de la inmigración ilegal a «las conquistas y el colonialismo» y advirtiendo que los africanos no habían viajado a Lisboa para que los europeos les dieran lecciones o para sufrir injerencias en sus asuntos internos.
Dicho lo cual, y tras hablar de «pillaje», propuso un trato que consideró «muy justo»: «O nos devuelven nuestros recursos o nos invitan a sus países». Mientras cifró en 1.000 millones de euros la cantidad de dinero con la que, según él, se podría resolver el problema: «Denme 1.000 millones de euros y les prometo que no exportaré inmigrantes», dijo.
Personalmente, creo que le debían haber dicho tranquilamente que entonces, los inmigrantes vienen porque él no frena su llegada. Y por tanto, es culpable directo de las muertes que se producen en las travesías. Para finalizar, creo también que se le debía haber inquirido por su vinculación a mafias de tráfico de inmigrantes, porque, si él dice que él podría parar la inmigración y que no lo hace porque no quiere, se supone que alguna mano tendrá con las mafias.
Precisamente, la cuestión inmigratoria centró el debate, siendo nombrado Zapatero como representante europeo para proponer un pacto euro-africano sobre inmigración:
El jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, propondrá hoy a los líderes de la Unión Europea y de África un "pacto euro-africano sobre inmigración", con el fin de fomentar oportunidades laborales para los jóvenes en sus países de origen, facilitar los flujos legales y luchar contra las mafias.
La inmigración será uno de los capítulos de la Cumbre UE-África, que se celebra este fin de semana en Lisboa, y Zapatero será el "orador principal" por parte europea en esta cuestión, mientras que el presidente de Senegal, Abdoulaye Wade, intervendrá como representante del grupo africano.
Y claro, viendo a estos dirigentes tan melosos, África advirtió que los africanos "no aceptarían acuerdos económicos que dividan y creen nuevas situaciones no acordadas".
Así que al final se calificó la cumbre de éxito aunque no se ha hecho nada:
- África ha rechazado los acuerdos comerciales: La mayoría de los gobiernos africanos presentes en la cumbre celebrada en Lisboa entre este continente y Europa han rechazado de pleno las propuestas EPA, Acuerdos de Asociación Económica que han sido criticados por organizaciones que luchan contra la pobreza por su temporalidad y por no proteger a la frágil agricultura africana.
- Como dice O Insurgente, el Gobierno portugués, temiendo que otros Gobiernos africanos boicoteasen la cumbre, si se prohibía la entrada a Mugabe, prefirió que no fuese Gran Bretaña a dejar de organizar el sarao. Mal desde luego, una copia de ZP con Chávez.
Noticias relacionadas: Zapatero recibirá a Gadaffi en la Moncloa @ Escaño 351. Al Ejecutivo español no le ha quedado más remedio que aceptar los deseos de Gadafi, aunque puede resultarle algo incómoda la presencia en esos lugares de alguien que, en el pasado, cuando su enfrentamiento con los países occidentales era evidente, lanzó más de una vez amenazas de ataque a España y reivindicó Ceuta y Melilla para Marruecos, afirmando que se encontraban «en manos extranjeras». Un amigouuuuuuuuuu...