NUEVO DIGITAL Internacional - La condena del Vaticano al proyecto de las Naciones Unidas para descriminalizar la homosexualidad sitúa a la Iglesia Católica en la vanguardia de la defensa de los regímenes musulmanes
En segundo lugar, además, esto refuerza la posición de los lobbies progre-rosas y de aquellos que encuentran siempre en el tema homosexual una razón para atacar a la Iglesia. Lo que es una auténtica desgracia, ya no sólo para aquéllos que realmente creemos en la Iglesia, si no además porque perpetúa todos los clichés peores que hay sobre ella (Eso sí, no se atrevería la misma señora a titular de la misma forma pero con la palabra "Islam" su artículo ni queriendo: eso no es multicultural).
Ahora bien, no creo que lo que diga la ONU sobre la homosexualidad vaya precisamente a modificar la legislación en determinados países. Así, como ya posteaba ayer, Irán ya ha dicho que les da igual lo que piensen los extranjeros, que ellos van a mantener la pena de muerte porque "la homosexualidad es considerada odiosa e inaceptable" y "lo que hacemos sirve para prevenir la corrupción".
A ello se une la postura de Tauran, el cardenal delegado de Benedicto XVI para el diálogo interreligioso, que ni siquiera protesta contra la situación de los cristianos en los países musulmanes (ni en la matanza de cristianos de este verano en la India*, en la que se mostró partidario del diálogo... al que no estaban muy dispuestos los hindúes radicales), pero que sin embargo, considera como el mayor enemigo al laicismo y ningún aliado mejor contra éste que una religión como el Islam que pone al Corán y a la ley religiosa, por encima de las leyes civiles y que ha celebrado que los "musulmanes hayan abierto un hueco a Dios en Europa" . Postura que parece ser contraria con la manifestada por el Papa, incluso muy recientemente, en la que decía que no era posible el diálogo interreligioso, si no había primero un diálogo intercultural profundo y sincero.
Así que, si no defienden a los propios cristianos en los países donde son perseguidos, ¿realmente van a defender a los homosexuales?
(Act.) Me pasa Crispal un enlace de Zenit del que copio este extracto:
Esto cambia bastante la consideración original, porque no se trataría entonces de despenalizar la homosexualidad si no de intentar obligar a que se introdujera el matrimonio homosexual. De modo que lo que ocurre es que se ha intentado esconder una parte sustancial de la resolución al público. Me extraña desde luego que esto lo haya hecho Nuevo Digital... La Unión Europea presentó el proyecto de resolución. Se discutirá probablemente el próximo día 10. Pero el argumento del Vaticano contra la exigencia de mandato de las Naciones Unidas para que se descriminalice la homosexualidad en todo el mundo ha situado a la Iglesia Católica en la defensa ‘de facto’ de los países musulmanes que la persiguen penalmente, con Arabia Saudí e Irán entre los regímenes islámicos que la condenan con la ejecución. De nuevo, las declaraciones del arzobispo Celestino Migliori, delegado permanente de la Santa Sede ante las Naciones Unidas, no dejaban ni un resquicio de duda en su cerrada defensa de los países que podrían sentirse “discriminados” y “en la picota” por no poder suscribir la declaración. Pero quienes sí están ya en la picota son los homosexuales iraníes que se balancean en las grúas del país colgados por el cuello.No creo que se me pueda conocer por ser anti-católica precisamente, pero creo que esto es una metida de pata que creo que ni yo la hubiera cometido (y mira que meto la pata veces, ¿eh?). Vamos a ver, me da igual para lo que algunos puedan usar la despenalización de la homosexualidad. El hecho es que es una cuestión privada que cada uno puede vivir como quiera. Y el peligro de que pueda ser usada por algunos para pedir que se apruebe el matrimonio homosexual, no es causa para oponerse a su despenalización. Además, se contradicen porque si aseguran que nadie quiere la pena de muerte, la cárcel o multas para homosexuales, no hay por tanto, razón para oponerse a la despenalización.
(...) “Si se adopta (la resolución de las Naciones Unidas para despenalizar la homosexualidad), se crearían nuevas e implacables discriminaciones. Por ejemplo, los países que no reconocen las uniones de personas del mismo sexo como ‘matrimonio’ serán puestos en la picota y convertidos en objeto de presión”, declaraba el arzobispo Migliori a una web católica. Sin embargo, lo que se está discutiendo no es el reconocimiento del matrimonio gay, sino el que la homosexualidad no sea prevista en los ordenamientos jurídicos como delito sometido a persecución, prisión o, incluso, ejecución.
La Stampa veía en la sorprendente maniobra de cobertura del arzobispo intereses inconfesables, -o, más bien, inconfesados- como el de que la potencial -y altamente improbable- despenalización internacional de la homosexualidad provocara “una reacción en cadena a favor de uniones homosexuales legalmente reconocidas en países que, como Italia, no disponen actualmente de legislación en ese sentido”.
Una vez más, los portavoces vaticanos se veían obligados a “clarificar” la opinión del representante de la Santa Sede ante las Naciones Unidas. El director de la Radio Vaticana, Federico Lombardi, aseguraba que “nadie quiere la pena de muerte, la cárcel o multas para homosexuales”. Pero tras conceder argumento tan contundente, Lombardi recordaba que “no es casualidad que menos de 50 estados miembros de las Naciones Unidas se han adherido a la propuesta en cuestión, mientras más de 150 no se han adherido”. “La Santa Sede no está sola”, resumía, desafiante, un portavoz vaticano que, en efecto, reconocía ya cómo la descriminalización de la homosexualidad podría utilizarse contra los países que mantienen la definición de matrimonio como una unión entre dos personas de distinto sexo.
En segundo lugar, además, esto refuerza la posición de los lobbies progre-rosas y de aquellos que encuentran siempre en el tema homosexual una razón para atacar a la Iglesia. Lo que es una auténtica desgracia, ya no sólo para aquéllos que realmente creemos en la Iglesia, si no además porque perpetúa todos los clichés peores que hay sobre ella (Eso sí, no se atrevería la misma señora a titular de la misma forma pero con la palabra "Islam" su artículo ni queriendo: eso no es multicultural).
Ahora bien, no creo que lo que diga la ONU sobre la homosexualidad vaya precisamente a modificar la legislación en determinados países. Así, como ya posteaba ayer, Irán ya ha dicho que les da igual lo que piensen los extranjeros, que ellos van a mantener la pena de muerte porque "la homosexualidad es considerada odiosa e inaceptable" y "lo que hacemos sirve para prevenir la corrupción".
A ello se une la postura de Tauran, el cardenal delegado de Benedicto XVI para el diálogo interreligioso, que ni siquiera protesta contra la situación de los cristianos en los países musulmanes (ni en la matanza de cristianos de este verano en la India*, en la que se mostró partidario del diálogo... al que no estaban muy dispuestos los hindúes radicales), pero que sin embargo, considera como el mayor enemigo al laicismo y ningún aliado mejor contra éste que una religión como el Islam que pone al Corán y a la ley religiosa, por encima de las leyes civiles y que ha celebrado que los "musulmanes hayan abierto un hueco a Dios en Europa" . Postura que parece ser contraria con la manifestada por el Papa, incluso muy recientemente, en la que decía que no era posible el diálogo interreligioso, si no había primero un diálogo intercultural profundo y sincero.
Así que, si no defienden a los propios cristianos en los países donde son perseguidos, ¿realmente van a defender a los homosexuales?
(Act.) Me pasa Crispal un enlace de Zenit del que copio este extracto:
Ahora bien, según el portavoz vaticano, la propuesta francesa no sólo busca "despenalizar la homosexualidad", "sino además introducir una declaración de valor político que puede derivarse en sistemas de control, según los cuales, toda norma --no sólo legal, sino también relativa a la vida de los grupos sociales o religiosos-- que no ponga exactamente en el mismo nivel toda orientación sexual podría ser considerada como contraria al respeto de los derechos del hombre".
"Esto puede convertirse claramente en un instrumento de presión o discriminación ante quien, sólo por poner un ejemplo muy claro, considera que el matrimonio entre un hombre y una mujer es la forma fundamental y originaria de la vida social y como tal ha de ser privilegiado", ha aclarado el padre Lombardi.
"No es casualidad que menos de 50 estados miembros de las Naciones Unidas hayan adherido a esta propuesta, mientras que más de 150 no han adherido. La Santa Sede no es la única", concluye.
Con todo y con eso, insisto en que deberían haberse limitado a hacer una declaración general (el Vaticano no tiene voto en la ONU, sólo voz) del siguiente cariz:
a) El matrimonio canónico -o el que lo es desde el punto de vista natural- es sólo el que se produce entre un hombre y una mujer.
b) La homosexualidad no debe ser penada y no estamos a favor de su penalización, tal y como ha declarado el director de Radio Vaticana, Federico Lombardi, a raíz de la polémica.
c) El hecho de la despenalización de la homosexualidad no quiere decir que el matrimonio homosexual deba ser considerado desde un punto de vista legal.
Finalmente creo que deberían publicar el texto de la propuesta francesa. Sería saludable para todos...
Relacionados:
Dialogo inter-religiões @ Der Terrorist.
Cientos de homosexuales italianos protestan indignados ante el Vaticano @ La Vanguardia.
*Osátiro me envió este post hace unas semanas en el que se señalaba que más de 500 cristianos han sido asesinados este verano en la India y que podría haber más de 50.000 desplazados. Diario Ya lo publicó y añadió la carta pastoral de los Obispos Indios. Y en Iglesia en marcha teneis más enlaces a noticias sobre la persecución sufrida.