Justo antes de salir para la manifestación leía por un lado las declaraciones de Blanco:
El secretario de organización del PSOE, José Blanco, se ha preguntado este sábado en un mitin celebrado en Lorca (Murcia) dónde está la razón para justificar la convocatoria de manifestación de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) que, según dijo, se produce contra un gobierno, y coincide con el periodo de menos víctimas terroristas.
Atención: Pepiño se ha preguntado y claro la respuesta ha sido la que cabe esperar de él...
Blanco, que participa junto a Mariano Fernández Bermejo, ministro de Justicia, en un mitin de la campaña de balance de la gestión del Gobierno, afirmó que la AVT tiene la consideración de su partido, y que las víctimas tienen su reconocimiento y apoyo, pero reiteró que esta convocatoria "es un despropósito", y que es "absurda e insensata".
Por eso se la espía ¿no?
Instó además al líder del PP, Mariano Rajoy, a que desautorice la convocatoria si cree que no tiene sentido, o que de lo contrario acuda a la manifestación, pero que si no hace ni una cosa ni la otra lo que conseguirá es quedar mal con todos "en un ejercicio de irresponsabilidad e hipocresía".
No seré yo la que apoye a Mariano Rajoy en que no haya asistido a la manifestación, pero tiene bemoles que Pepiño acuse a alguien de irresponsabilidad (ya no nos acordamos del escándalo de Ibiza, ¿no?) o de hipocresía (por ejemplo, ¿qué tal un examen de las malas compañías que tiene el PSOE en sus manifestaciones?)
Según Blanco, si el PP deseara lo mejor para España estaría apoyando al gobierno en la lucha contra ETA, y opinó que "en el PP todos dirigen, pero Rajoy no dirige a nadie".
a) ¿Apoyar al Gobierno en la lucha contra ETA? Hmm, pero ¿no estábamos en una fase de confrontación?
Lo más delirante es que el propio Rubalcaba ha confirmado en su "desmentido" esa disposición gubernamental a ceder ante ETA, al afirmar que, durante las negociaciones, "parecía que –el de los presos- no era un problema acuciante para ellos" y "que querían empezar el diálogo por otro lado, y nosotros lo respetamos". Con ese infame "respeto", Rubalcaba ha dejado involuntariamente en evidencia la propia disposición del Gobierno socialista a negociar cosas, al margen del futuro de los presos, que nunca ha estado dispuesto a negociar Gobierno alguno bajo ninguno de los siempre mal llamados "procesos de paz". Zapatero, además, adquirió esos compromisos con ETA desde antes de que la organización terrorista emitiera aquel chantajista comunicado de "alto el fuego". Vamos, lo mismo que hicieron los separatistas con ETA en Estella antes de la tregua del 98.
En una maravillosa equidistancia el PSOE dice que tiene toda la consideración por la AVT y que "respeta" a los de la ETA.
b) ¿por qué tanta fijación con que Rajoy no dirige? ¿Es por eso que han filtrado la supuesta noticia de la inexistente separación de Aznar y Ana Botella? Todavía me acuerdo de cuando, antes de las elecciones del 2004, se anunció también que se iban a separar y que Aznar tenía una aventura amorosa con Cayetana Guillen-Cuervo y ésta al ser preguntada sobre el particular lo negó diciendo: "Uff, no sabeis cómo se han puesto mis amigos de izquierdas. Me han dicho: pero, ¿cómo te has podido liar con Aznar?".
Iñaki Ezkerra, sin embargo, sí veía necesaria la manifestación:
En declaraciones a Europa Press Televisión, Iñaki Ezquerra defendió que ya "es el momento de ilegalizar Acción Nacionalista Vasca (ANV) y el Partido Comunista de las Tierras Vascas (PCTV)" y recalcó que el Estado de Derecho "debe ponerse en marcha contra el mundo de ETA".
Asimismo, el presidente del Foro de Ermua remarcó que "no es el momento de estar soportando el chantaje" de ETA, ni tampoco "la administración del terror a la que nos tiene sometidos". Además subrayó que, "aunque la voluntad de ETA fuera de no asesinar", algo que no cree, "no se puede soportar que una democracia esté a merced de lo que decide una banda terrorista".
Sin embargo, Conde-Pumpido ya había dicho que no veia causas para dicha ilegalización a la vez que insultaba a una periodista de la COPE.
Mariano Rajoy pidió antes de la manifestación que todos fuéramos porque la AVT defiende derechos "que no son negociables", pero él no lo hizo, haciendo caso más a Pedro J. (parece mentira después de lo que este hombre ha dado la tabarra con la guerra de Irak..., mientras de las de otros sitios -Congo, Haití...- no dice ni mú) que a la AVT que sí se encuentra necesitada de apoyo.
Pero es que además, no yendo, ha permitido que un ser setario con bló heterodosso diga que no iba a la manifestación porque "no tiene la conciencia tranquila". Y se extrañarán de que 8 de cada 10 españoles no confíen en Rajoy, aunque no comparto la diferencia entre las dos tendencias que señala el Confidencial:
Este barómetro revela un cierto desfondamiento del presidente del PP, criticado por el sector más conservador por su negativa a cancelar un compromiso anterior y acudir a la manifestación de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) convocada para mañana en Madrid. El partido atraviesa por el pulso entre dos tendencias. Una, más centrista, defiende mirar al futuro, superar la masacre del 11-M y captar más electores. Otra, situada más a la derecha, sigue empeñada en la búsqueda de los distintos agujeros negros de la tragedia.
Yo no creo que la diferencia esté en "superar" o no la masacre del 11-M. Yo creo que son más bien un cúmulo de circunstancias en las que, intentando ser muy centrista, no ha contentado a nadie.
Muy mal tienen que estarlo haciendo además, cuando con lo mal, rematadamente mal que lo está haciendo la mirada positiva, resulta que todavía hay más gente que confía en él que en Rajoy:
La muestra revela que tampoco soplan buenos vientos para José Luis Rodríguez Zapatero en el final de la legislatura. Seis de cada diez encuestados por el CIS (59,3%) desconfía del presidente, lo que supone 1,9 puntos más que en julio pasado. Frente a esta percepción, el 37,1% dice confiar en él.
Pero hay otro dato muy importante:
Zapatero y Rajoy arrancan la precampaña electoral a trompicones. Porque, si se cruzan estos datos con lo que opinan los votantes que participaron en las elecciones de 2004, resulta que ninguno de los dos inspira confianza entre una parte significativa de su electorado respectivo.
Estas son las cifras. El 28,6% de los electores socialistas confiesa abiertamente que tiene poca o ninguna confianza en Zapatero, aunque un 69,7% de ellos confía en el presidente. A su vez, el 34,3% de los votantes del PP reconoce que Rajoy le inspira poca o ninguna confianza, mientras que el 62,8% de los electores populares apoya la gestión de Rajoy.
El problema es que, mientras que la mirada positiva es muy sectario cuando quiere serlo, pone cara de niño bueno y te clava la daga por la espalda (¿a que prácticamente nadie se ha enterado de la subida de la electricidad que ha hecho su Gobierno o de lo que realmente significa la Ley del Suelo que han aprobado dándose besos de lo solidarios que son?), los del PP están esperando a que caiga la breva y la mirada positiva se dé un porrazo. Pero para eso hay que ser firmes y al PP se le ve dubitativo. Sólo hay que ver lo que ha ocurrido con Sarkozy y la huelga.